“Stankovic and the sweet poison”, el cóctel de Mixology Five (Palma de Mallorca)

Es bien sabido que la juventud no está reñida con la excelencia. Y, como muestra, no hay más que asomarse a Mixology Five. Un local en el centro de Palma de Mallorca que, a pesar de ser una apertura reciente, cuenta con las bases necesarias para desafiar al tiempo. Para empezar, un espacio diseñado con mimo y dividido en dos ambientes. Por un lado, su terraza abierta a la calle. Una con espíritu de chill out en la que disfrutar la nocturnidad.

Por otro, un interior en el que mesas bajas escoltan a la protagonista del espacio: una barra dispuesta a sorprender a cada visitante. Y es que, más allá de la frescura y novedad de su propuesta, esta coctelería cuenta con un atractivo único: buscar que cada cliente viva la experiencia de cada cóctel. Una forma de ver, paso a paso, la elaboración de un cóctel como si de un espectáculo de show cooking se tratara. Un hecho que refuerza el tándem que forman gastronomía y coctelería.

En ese singular laboratorio de sabores que es Mixology Five es donde Roger Paulino da Silva hace de cada receta ese cúmulo de sensaciones que persigue el local. Una labor que es, en realidad, parte de su filosofía de trabajo: a pesar de que el local cuenta con una carta de cócteles, él reconoce que le gusta conocer los gustos del cliente para amoldar cada combinado a su expectativa.

La historia de Roger con la coctelería es la de una casualidad. Formado en marketing y publicidad, el diseño era su pasión cuando terminó de estudiar en su Brasil natal. Con vistas a profundizar en la creación gráfica, decidió saltar el Atlántico para formarse en Madrid. Una ciudad en la que sus colaboraciones como freelance no le alcanzaban para vivir con tranquilidad. Por este motivo su tío, afincado en Palma de Mallorca, le animó a trabajar la temporada estival en la isla. Una que arrancó como camarero en un catering para llegar, casi por casualidad, al otro lado de la barra.

Sería así como su hobby, la coctelería, desbancaría a su pasión, el diseño invirtiendo el orden de sus pasiones. Y de eso ha pasado ya más de una década.

Nombre del mixólogo: Roger Paulino da Silva
Nombre del local: Mixology Five

¿Cuál es el botánico o garnish sin el que no podrías vivir? La hierbabuena me gusta mucho, pero sin duda tengo que elegir la lima. Creo que es el garnish de referencia en la coctelería mundial.

El bartender ¿nace o se hace? Se hace. Incluso si eres un artista, tienes que trabajarlo. El talento se puede tener, pero hay que luchar y aplicarse para crecer y no quedarse nunca atrás. Y, por supuesto, tener pasión. Algo imprescindible.

¿Hacia dónde crees que evoluciona la coctelería en España? Sin duda, hacia cócteles frescos y reproducibles. Que se puedan hacer, incluso, en casa. Durante los últimos años, hemos ido un poco hacia atrás. La idea de la coctelería moderna, con sus espumas y demás avances, nos ha frenado desde mi punto de vista. Es cierto que la coctelería se acerca mucho la cocina. Pero, incluso así, el cliente quiere disfrutar de una copa sin complicaciones.

¿Qué es lo más divertido que te ha pasado detrás de una barra? Pues de entre todas, un momento muy cómico con una clienta inglesa de cierta edad. Llegó a la barra hablándome de un cóctel que había tomado hacía años en Mallorca. Me explicó cómo era y, para dirigirme todavía mejor, rebuscó en su Facebook para enseñarme la foto. Y cuál fue mi sorpresa cuando lo había tomado en el local en el que yo trabajaba entonces. A ambos nos quedó la duda de si, incluso, se lo había servido yo. ¡Pero ni yo me acordaba de ella ni ella de mí!

¿Por qué cóctel sientes especial predilección? Por el Negroni o el Daiquiri. Son muy clásico, aunque siempre estoy abierto a probar cosas nuevas.

¿Qué es lo que más te gusta de Brockmans? Es una ginebra perfecta para la coctelería. Su versatilidad permite usarla no solo para hacer cócteles sino, también, para espumas o reducciones. Y, por otro lado, es una ginebra sorprendente. Aromática y floral pero con toda la personalidad de este destilado.

“Stankovic and the sweet poison“, ¿por qué has llamado así a tu cóctel? Se lo he dedicado a mi amigo Stan (se ríe). Organizó una fiesta en su casa y, para conquistar a una chica, le preparó un gin tonic de Brockmans. El caso es que ella estaba muy cansada y se quedó dormida en su sofá. Y el pobre Stan tuvo que aguantar que le tomáramos el pelo con el increíble efecto que había tenido su copa.

Ingredientes del cóctel de Mixology Five

• 50 ml. de Brockmans Gin
• 25 ml. de zumo fresco de limón
• Una cucharada de mermelada de frutos rojos e hibiscus (handmade)
• 15 ml. de infusión dulce de jazmín tropical
• 10 ml. de clara de huevo
• Un top de limonada de rosas

Elaboración

Mezclar todos los ingredientes, salvo la limonada de rosas, en una coctelera. Hacer dry shake.

Añadir hielo pilé en un vaso ancho. Verter la mezcla y añadir el top de limonada.

Decorar con una cucharita con mermelada de frutos rojos, pétalos de naranja sanguina deshidratada y frutos del bosque confitados.

Acompañar de un chupito de Cava Brut infusionado con cítricos.

Aromático, complejo y refrescante. Así es este “dulce veneno” que nace detrás de la barra de Mixology Five para seducir a quien descubra un local diferente para el que la coctelería es pasión.