Press For Gin Londres 2018

Durante los días 19, 20 y 21 de marzo tuvo lugar el primero de una larga serie de eventos que ocurrirán a lo largo de este 2018. El nombre del local ya daba una pista de lo que los invitados iban a encontrarse: un santuario donde el color negro iba a ser el actor principal, además de la ginebra, por supuesto.

Los asistentes hicieron cola detrás de una gran puerta sin esperar lo que el universo Brockmans tenía guardado para ellos.

BLACK SWAN STUDIOS, UN LUGAR MÍSTICO

La entrada estaba decorada de tal forma que daba la impresión de estar entrando en un bosque misterioso. Ramas y follaje oscuro, tanto en paredes como en un techo muy bajo. Uno que, prácticamente, rozaba las cabezas de aquellos que se atrevieron a decidir pasar una noche Like No Other. Además, el local contaba con un poco de niebla artificial para dotar de más carácter si cabe a la atmósfera del evento.

Místico, fabuloso, misterioso o atrevido. Usa una palabra o úsalas todas, porque describen perfectamente lo que pudo sentirse al poner un pie en este local.

Ya dentro, después de haber recibido un gin tonic, cada persona tenía asignada una mesa donde poder seguir la velada. Esta, muy bien decorada con flores, cubertería, una caja misteriosa cerrada con un candado y, cómo no, un botón Press For Gin al que cualquier persona podía apretar para recibir un cóctel en cuestión de segundos.

Como ya es costumbre, contamos con la presencia de Tony Bowen, nuestro Human Jukebox. Fue el encargado de poner banda sonora a una noche muy especial tocando únicamente las canciones que los asistentes pedían vía Twitter.

CÓCTELES MISTERIOSOS Y UNA ACTUACIÓN ESTELAR

Los platos de comida iban saliendo, contando todos con alguno de los botánicos empleados en la destilaciónde Brockmans. Y llegó entonces el segundo cóctel, el Gin Tiki, que llevaba atado al vaso una letra. Antes de poder adivinar qué significaban estas letras, las luces bajaban y comenzaba la actuación más destacada de la noche. Yusura, una equilibrista asiática con el cuerpo lleno de tatuajes, bailó y levitó al son de la música de Tony, usando sus cuerdas que colgaban del techo.

No sabemos si domina la magia oscura, pero logró hechizar a todos y cada uno de los asistentes que no pudieron quitar su mirada hasta que el número terminó entre fuertes aplausos.

Las personas sentadas en cada mesa, entonces, debían poner en común sus letras para adivinar la palabra secreta. Esta era U-N-L-O-C-K-E-D (en español, descifrado o abierto). Al comunicar la clave a nuestro personal, se les proporcionaba una llave que abría el misterioso cofre Brockmans Perfumery. Este encerraba los ingredientes y las instrucciones con los que cada invitado debía crear su propio cóctel.

El último combinado de la noche fue el Bleeding Heart. Hecho con Brockmans Gin, jengibre, kombucha (bebida fermentada a partir de té) y vainilla, fue el rey de la noche.

La guinda del pastel o, mejor dicho, el arándano en el gin tonic, lo pusieron, por un lado el GIF Booth, donde la gente pudo tomarse infinitos GIFs que le llegaban instantáneamente al teléfono móvil. Por otro, la estación de dulces donde se tuvo la posibilidad de degustar desde merengues helados hasta otros muchos postres.

Los asistentes se fueron con una sonrisa y el local cerró su oscura cortina.

Un evento que sirvió para que los invitados comprobaran que la oscuridad puede ser muy divertida. Solo hay que atreverse a entrar en ella. Y aunque algunos ya supieran esto, este evento no dejó a nadie indiferente.