5 propósitos del amante del gin tonic para 2018

Una lista que busca conseguir objetivos y mejorar nuestra vida. Si eres un amante del gin tonic, tu lista de propósitos de Año Nuevo no incluirá los de todo el mundo. ¿No lo crees? Descúbrelo en este post.

Ir al gimnasio, comer sano, quitarnos algún vicio, ver todas esas películas atrasadas o planificarnos mejor el tiempo. Seguro que todas estas metas han formado parte o lo hacen todavía de esa lista mental que, transcurridas las doce campanadas, nos hacemos en la cabeza y hasta inmortalizamos en papel. Unas intenciones que en muchas ocasiones cumplimos a medias, y en muchas otras simplemente abandonamos transcurrido un tiempo.

Si tú todavía estás con tu lista de propósitos de Año Nuevo a vueltas o, incluso, perfilándola para animarte a ti mismo a hacerla es momento de que respondas a una pregunta: ¿eres un amante del gin tonic? Si tu respuesta es afirmativa, a tu lista personal tendrás que sumar unos propósitos específicos.

Unos comunes para todos aquellos que no entendemos la vida sin una copa de balón entre las manos, sin el burbujeo de los distintos tipos de tónica en el paladar ni el singular sabor de la ginebra como compañera de las noches más memorables de tu propia historia.

Así que, si te animas a convertir los próximos meses en unos inolvidables, no le pierdas ojo a cinco propósitos que debe haber en tu lista si eres un amante del gin tonic:

1. Prométete a ti mismo salir más

En la lista del común de los mortales, esta frase se conjuga a la inversa. Trasnochar menos es habitual en las listas de propósitos del año que nosotros, como seres nocturnos que somos, no acabamos de comprender. La noche no solo es el hábitat natural del gin tonic sino, también, la atmósfera perfecta para conocer locales inolvidables, vivir noches irrepetibles y saborear gin tonics con un sabor propio.

Así que proponte descubrir todos los nuevos locales de tu ciudad, disfrutarlos, vivirlos y compartirlos. Ya, cuando comience el próximo año, se planteará si es momento de cortarse la coleta… o no.

2. No dejar para el último momento las cosas… o, más bien, los ingredientes del gin tonic

La organización también es un imprescindible en nuestras listas de propósitos de cada año. Para el amante del gin tonic, la cosa no pasa por tener organizada la casa o la vida en general. No: se refiere, más bien, a que llegado ese mágico y casi místico ritual de preparar un gin tonic nos encontremos con que algo nos falta para poder disfrutarlo.

Un contratiempo que, en ocasiones, podemos solventar con una apresurada salida a la calle que retrasará ese maravilloso momento de paladear por primera vez la copa; pero que, en otras ocasiones, puede boicotear nuestro momento de disfrute.

3. No quejarnos más ni del calor ni del frío

Algo muy nuestro: lamentarse en los meses de invierno y, después, hacerlo también cuando el mercurio sube. Algo que podemos erradicar de nuestra mente si le vemos el lado positivo. El frío es una oportunidad única para disfrutar de la ginebra de otra manera: con cócteles especiados y combinaciones con otros destilados, que nos ayuden a paliar esos grados de menos del exterior. Es más: siguiendo con este ejercicio de relativizar que proponemos, ¿qué mejor que el frío del invierno para que ese hielo tan vital que forma parte de nuestra copa se mantenga?

Y si el frío ya no es motivo de queja, ¡también tenemos argumentos para el calor! Una época en la que el carácter refrescante del gin tonic se convierte en el compañero perfecto de casi cualquier momento del día a partir de la media tarde. Un auténtico aliado para tener esa singular sensación de piel erizada a pesar de lo que caliente el sol.

4. Ver más a los amigos, firme propósito de Año Nuevo

Curiosamente, este propósito de Año Nuevo es un tema recurrente. El desarrollo de las nuevas tecnologías ha hecho que estemos aparentemente más cerca que nunca y, a la vez, más lejos que jamás. Reencontrarse, hablar, debatir, sonreír y compartir son elementos indispensables para ser un poco más felices y sentirnos más a gusto. Algo que, para un amante de un gin tonic, gira obligatoriamente en torno a una copa.

Un auténtico epicentro social que invita a relajarse, dejar correr el reloj, olvidarse de las preocupaciones o, incluso, a sentirlas más ligeras compartiéndolas con nuestro círculo de confianza.

5. Saca más tiempo para ti

Tiempo libre, un bien preciado. Uno para disfrutar con quien quieras o, incluso, la placentera soledad de aquel que comparte el tiempo consigo mismo y una copa de gin tonic.

Cinco propósitos que solo los amantes del gin tonic entenderán y compartirán. ¿Te animas a cumplirlos?