Brockmans /
Frutos negros, el espíritu de Brockmans
Lograr un sabor simplemente único, con un paladar sensual y un sabor intensamente suave. Ese fue el objetivo de los creadores de Brockmans Gin y, sin duda, se ha conseguido. Un logro que se basa en dos de los botánicos Like No Other que hacen de ésta una ginebra singular. Porque, entre la cuidadosa selección botánica de Brockmans, los frutos negros son los protagonistas de su sabor.
La elaboración de la receta de Brockmans Gin supone un viaje a través de la geografía. Una auténtica aventura buscando botánicos únicos que, unidos, crearan un sabor excepcional. Precisamente por eso, el rasgo más original de Brockmans Gin es el sabor de dos frutos negros seleccionados en los bosques de Bélgica, Alemania y Noruega.
Moras negras y arándanos azules cultivados con mimo que, sumados al resto de los botánicos de su receta, convierten a Brockmans en una ginebra reconocible desde el mismo momento de quitar el tapón de la botella.
Pero, además del aroma y el sabor, son estos dos botánicos los responsables de la sensualidad de Brockmans. Un juego de equilibrios que son un auténtica caricia en el paladar. A pesar de que los arándanos azules son agridulces, su mezcla con las moras negras influye en que el tacto en boca de Brockmans sea tan suave y equilibrado. Un pacto de sabores que invita a abandonarse al placer de disfrutar de sensaciones como la acidez, el dulzor y los sutiles matices de flores que conlleva su procedencia (en Brockmans, es posible apreciar aromas de violetas gracias a la presencia de estos dos botánicos).
Un pulso para los sentidos y para los paladares más exquisitos.