Brockmans /
Las mejores sombrererías de Londres
Nos encantan, pero a veces nos cuesta dar el paso. Sobre todo nos gustan mucho, pero mejor en la cabeza de otro. Usar un buen sombrero y llevarlo con elegancia y categoría se ha convertido en todo un arte. Su sombra es especial y útil en muchas ocasiones. El sombrero es una prenda que se resiste a desaparecer, pese haber quedado en el olvido por parte de “ellos” durante casi 50 años por desuso.
Para rememorar el uso y confección de esta prenda que tarde o temprano retomaremos con fuerza, ya ellas lo hacen, Londres es sin duda la cuna de los sombreros. Su tendencia es imparable y darse una vuelta por las mejores sombrererías de la capital británica es toda una experiencia, de esas que marcan.
Una de ellas se encuentra en el número 7 de St James’s Street, se trata de Lock & Co. Hatters una de las mejores sombrererías del mundo. Fundada en 1676 esta sombrerería se encuentra en la exclusiva lista de proveedores oficiales de la familia real inglesa, donde se confeccionan las chisteras y sombreros del Príncipe Carlos.
Pero probablemente la tienda de sombreros más famosa de Londres es Bates Hats. Más de cien años después continúan confeccionando sombreros de copa, fedora, panamá, gorras de tweed… para clientes de la talla de Tom Jones, David Bowie y Eric Clapton.
Hornets ubicada entre la 2 y la 4 de Kensington Church Walk es uno de los mayores distribuidores de Christys Sombreros, una de las tiendas más trendy de esta prenda de la ciudad. Esta preciosa tienda de ropa de segunda mano contiene una gran variedad a través de su página web y todos los sombreros se fabrican por encargo por lo que también tienen peticiones especiales si te comunicas con ellos.
Otra buena opción es Herbert Johnson, sombrerero real desde que en 1889 el entonces Príncipe de Gales recomendó a un joven aprendiz llamado Johnson que abriera su propio establecimiento.
Para muchos la prenda definitiva, porque se encuentra muy cerca de la cara. Proporciona un aura de misterio, clase, y estatus, da igual la época a la que nos remontemos. Y recuerda que “está bien tener sombrero por si se presenta una buena ocasión para quitárselo”. Ya lo decía Joaquín Sabina.
Fotos Adam Godfrey | ally